Tus siete centros de energía, tus chakras, son el asiento de tus derechos naturales, otorgados por el Universo en tu nacimiento. Sin embargo, a veces, durante el curso de nuestras ocupadas vidas, olvidamos que se nos han otorgado estos derechos divinos. No los honramos, ni por extensión, a nosotros mismos.
Algunos de sus derechos más valiosos se enumeran a continuación. Repítelos a ti mismo a diario. Ponga esta lista donde pueda verla con frecuencia. Recuerda qué es exactamente lo que el Universo quiere que tengas y qué es exactamente lo que ya te ha dado.
Tengo derecho...
Tengo derecho a que se satisfagan mis necesidades básicas.
Tengo derecho a que se sientan cuidados, seguros y valorados.
Los tengo justo a mis deseos.
Tengo derecho a sentir mis emociones y expresarlas libremente.
Tengo derecho a elección personal.
Tengo el derecho de tomar decisiones que honren quién soy.
Tengo derecho a trazar límites y decir "no".
Tengo derecho a amar libremente.
Tengo derecho a decir mi verdad.
Tengo derecho a ver el mundo tan hermoso.
Los tengo justo en mis sueños.
Les tengo derecho a lo que me ofrece mi maestro interior.
Les tengo derecho a una relación personal con Dios.
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